lunes, 31 de mayo de 2010

Sí podemos sufrir un gran terremoto

DICE. Presidente del IGP, Ronald Woodman, refiere que solo la prevención podrá salvarnos. En caso ocurra un terremoto de 8º frente a Lima morirían más de 50 mil personas y los vecinos de La Punta tendrían 11 minutos para huir.

Consuelo Alonzo C.

El incremento de la actividad sísmica que estamos padeciendo en el país (aproximadamente un sismo por día) no tiene ninguna relación con los terremotos ocurridos en Chile o Haití y mucho menos con algún fuerte temblor en otra nación pues la corteza terrestre no tiene forma de comunicarse a un sitio lejano. Si pensó que esto, dicho por el presidente ejecutivo del Instituto Geofísico del Perú (IGP) Ronald Woodman, nos aleja de la posibilidad de padecer un gran terremoto, se equivoca.

Cuanto más grande sea el silencio sísmico, más probabilidades tenemos de padecer uno en Lima. ¿De qué magnitud? Eso lo sabremos solo cuando ocurra, pero podría ser tan fuerte como el que sufrió el vecino país del sur o incluso mayor. “Sí podemos sufrir un sismo como el de Chile, por que ya lo tuvimos en el pasado. Lo que nos alivia es que no ocurren con frecuencia”, dijo.

Lo que Woodman rememora es que el 28 de octubre de 1746 hubo un terremoto en Lima y Callao de aproximadamente 8.4º en la Escala de Richter seguido de maremoto que solo dejó en pie a 25 de las tres mil casas que en ese entonces existían y mató a unas 20 mil personas.

Pese a ese registro histórico según el Plan de Prevención por Sismo 2010 del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci), presentado el 25 de marzo, la cuidad capital “carece de un plan integral de emergencia y plan de contingencia ante un evento de gran magnitud o un tsunami”.

Sin embargo, Woodman dice que no se debe ser tan criticón porque existe un decreto supremo que ordena un plan de evaluación de la vulnerabilidad ante la ocurrencia de un sismo o un tsunami y si logra su meta en un año sabremos cuán vulnerables somos.

Vulnerabilidad

Pero en un escenario imaginario de un sismo de grado 8 en la escala de Richter frente a Lima, el Indeci se ha planteado un panorama difícil en el que estima que un máximo de 51 mil 19 personas morirían, 686 mil 105 resultarían heridas, 200 mil 347 viviendas colapsarían y 348 mil 329 quedarían altamente afectadas. El distrito donde se calculan más muertos sería Comas (6,333) seguido del Callao (5,844), Puente Piedra (3,037) y Carabayllo (2,774).

También se estima entre dos mil y 13 mil muertos en la población escolar, si el evento ocurre en horario escolar, según el estudio de Wapmeer (Agencia Mundial para Monitoreo Planetario y Reducción del Riesgo Sísmico). Pero además de eso, se generaría una ola de seis metros de altura que afectaría a toda la zona costera, especialmente a La Punta, lugar donde, dice el documento, los vecinos solo tendrán once minutos para evacuar a una zona segura antes de que llegue el agua.

Prevención

¿Esto podría hacerse realidad mañana? “¿Por qué la gente se hace esa pregunta? La respuesta es: sismos van a haber siempre. Si son jóvenes van a sentir más aún y de grandes magnitudes. ¿Qué puedo hacer? Eso no tiene que preguntárselo para hacer algo”, sostiene Woodman.

En ese sentido, dice que lo que podrían hacer las autoridades es normar y multar ejemplarmente a quienes no cumplan, por ejemplo, con tener paredes de su vivienda sin amarres que podrían hacer caer y matar a alguien en un sismo. Con esto, agregó el titular del IGP, lo que se pretende es que la población entienda que la vulnerabilidad que tengan ante un sismo dependerá de cuán preparados se encuentren. “No sabemos cuándo nos vamos a morir, pero si un escapulario nos salvará de ir al infierno nos lo tenemos que poner todos los días, igual pasa con la prevención”. Hagámosle caso.

hace 40 años

Homenaje. Con un minuto de silencio, al mediodía de hoy se rendirá homenaje a las víctimas del terremoto y posterior aluvión en la provincia de Yungay (Áncash), al cumplirse 40 años de la tragedia.

Tragedia. Como se recuerda el 31 de mayo de 1970 se produjo un fuerte sismo y posterior aluvión que azotó Áncash, dejando como saldo unos 69 mil muertos, una infinidad de viviendas destruidas y más de un millón de damnificados.

OPINIÓN

"¿Por qué se preguntan cuándo habrá un sismo? La respuesta es: sismos van a haber siempre. Si son jóvenes van a sentir más aún y de grandes magnitudes”.

Ronald Woodman
presidente ejecutivo del IGP

La historia nos dejó enseñanzas

El registro histórico revela que Lima ha sufrido el impacto de 43 grandes sismos, y los terremotos de 1586, 1655, 1687 y 1746 alcanzaron intensidades destructivas del orden de IX a X en la escala de Mercalli Modificada.

El Callao fue afectado por tsunamis en 1586, 1687 y 1746, este último produjo pérdidas catastróficas.

En el presente siglo se activaron dos áreas sísmicas vecinas a Lima: Chimbote- Huacho: activada en el sismo del 31 de mayo de 1970 y 17 de octubre de 1974; Lima-Pisco: activada en el sismo del 3 de octubre de 1974. El área sísmica Huacho-Lima faltaría activarse (el epicentro del sismo del 24 de mayo de 1940 es impreciso).

Un total de 569 instituciones educativas y 4 estaciones de bomberos están ubicados en suelos poco competentes (del tipo III y IV) según el Indeci.