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Uno de los objetivos de la medida es abrir de una vez por todas el colector de La Perla. Protestas de los vecinos quedarían prohibidas.
Redacción La República.
Con la finalidad de solucionar lo antes posible el problema de los vertimientos de desagüe en el mar capitalino, el gobierno declaró en estado de emergencia el sistema de alcantarillado sanitario de Lima y Callao. Esta medida, que se prolongará por 60 días, será aplicada en las zonas que comprenden los emisores y los colectores de aguas servidas concentrados en el interceptor norte (Ventanilla, playa Taboada), según el decreto supremo 030 de la Presidencia de Consejo de Ministros (PCM). 
"Por razones de necesidad pública e interés social, el Estado está en la obligación de adoptar medidas necesarias para garantizar la adecuada prestación del servicio de alcantarillado y así garantizar su continuidad sin poner en riesgo a la población", se desprende de la medida publicada ayer en el diario El Peruano.
ACCIONES URGENTES
El ministro de Vivienda, Construcción y Saneamiento, Enrique Cornejo, explicó que esta medida permitirá realizar diversas acciones destinadas a enfrentar de la mejor manera la problemática del colapso del colector Costanero y la apertura del emisor de La Perla.
Cabe precisar que el Servicio de Agua Potable y Alcantarillado (Sedapal) tiene previsto abrir en los próximos días, de manera temporal, el colector del distrito La Perla para descargar por allí los desagües de 24 distritos capitalinos.
Los vecinos de La Perla están en desacuerdo con esa medida y para expresar su rechazo vienen organizando vigilias en la zona para impedir la apertura del colector.
Precisamente, nuestra Constitución Política (en el artículo 137) establece medidas de excepción como la declaratoria de emergencia a través de la que se puede restringir o suspender la libertad de reunión y de tránsito en determinado lugar del territorio.
Aunque, en el Decreto Supremo 038 no se hace mención al impedimento de las reuniones, la naturaleza de la medida hace suponer que las protestas estarán prohibidas de ahora en adelante en esas zonas.
"NO A LA ARBITRARIEDAD"
Consultado sobre este punto, el alcalde de La Perla, Pedro López, dijo esperar un proceder "sensato" de parte del gobierno e instó a que no se cometan arbitrariedades durante los 60 días que dura la medida de excepción. 
En ese sentido, instó al Ministerio de Vivienda y otros entes competentes a tomar las decisiones necesarias para "neutralizar los daños contra la vida y salud de los vecinos".
Por otro lado, Pedro López se mostró escéptico ante la efectividad del espigón de cien metros, que se pretende construir para mitigar la contaminación tras la apertura del colector en su jurisdicción, lo que motivó el rechazo de los vecinos.
Según dijo, un estudio de impacto ambiental hecho por ingenieros contratados por Sedapal en 1996, revela que incluso a 300 metros de distancia el daño sería inminente. No precisó si seguirá apoyando las protestas en el lugar.
EL DATO
Repararán talud. El ministerio de Vivienda además realizará obras para estabilizar el talud de la avenida Costanera, en San Miguel, que cedió ante el deterioro del colector que desembocaba por allí desde hace más de 40 años. Como se recuerda, los sismos ocurridos a fines de marzo frente a las costas del Callao agravaron la situación del talud costanero.
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