Advertencia. Ciudad capital no está preparada para soportar lluvias fuertes. Autoridades ediles debieron realizar antes de la temporada de lluvias los trabajos de prevención, pero no cumplieron las recomendaciones.
Consuelo Alonzo C.
Ni las lluvias que estamos viviendo en pleno verano ni los deslizamientos que se están presentando en algunos puntos de Lima nos deberían causar sorpresa ni cogernos desprevenidos. El Centro de Predicción del Clima de los Estados Unidos, en su último reporte sobre el Fenómeno de El Niño-Oscilación Sur (ENSO), y el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) ya habían advertido sobre el incremento de las precipitaciones pluviales y los 57 puntos críticos pasibles a sufrir algún evento adverso, justamente por las lluvias.
Incluso los alcaldes fueron notificados sobre cuáles eran los puntos críticos de su jurisdicción y por ende sabían cuáles eran las obras de prevención que debían ejecutar antes del verano, sostiene el comandante Arístides Mustio, director del Indeci Costa-Centro. “Incluso, en diciembre acudimos con la Fiscalía de Prevención del Delito, y esta exhortó a las autoridades ediles para que hagan obras”, dijo.
¿Qué ocurrió entonces? Al parecer las autoridades hicieron caso omiso a las advertencias. Prueba de ello es lo ocurrido en Collique, donde hasta ayer las familias damnificadas permanecían a la intemperie o refugiadas en pequeñas tiendas de campaña, a la espera de ayuda.
Medidas recomendadas
Entre las principales acciones que debieron tomar los alcaldes está la reubicación de las poblaciones que se encuentran en zonas de riesgo (ver infografía), como son las quebradas secas, o en puntos elevados de los cerros, donde los suelos o las pendientes ponen en riesgo constante a las personas que han invadido el lugar. Con acciones como esas, dijo Mustio, se podría evitar que eventos de la naturaleza afecten a los 20 mil pobladores, aproximadamente, que viven cerca a los puntos críticos advertidos.
La prevención primero
Es más, sostuvo que estas mismas autoridades saben que hay trabajos que deben ejecutar sin necesidad de recordatorio alguno, como es la descolmatación de los cauces y evitar el arrojo de basura y desmonte, si tienen una cuenca en su jurisdicción. “No deben, por ejemplo, esperar a que crezca el río para proteger las bases de los puentes o descolmatar los cauces y las riberas”.
Y después de haber visto las lluvias del último fin de semana, Mustio indicó que lo único que quedó como conclusión es que, en realidad, Lima no está preparada para soportar lluvias fuertes.
El principal problema, según el funcionario del Indeci, es la insensibilidad de la gente a la hora de ubicar y construir sus viviendas. “En Collique, por ejemplo, cinco mil personas ubicaron sus viviendas en las laderas de un cerro, y ahí es donde se registraron los mayores afectados”.
Esto se debe principalmente al alto grado de vulnerabilidad y a la pobreza. “No creo que en este caso se pudiera evitar el embalse, pero sí mover a la población. En Lima recibimos en unas horas el 30% del total de lluvias que se reciben en un año, y obviamente las casas de cartón no iban a soportarlo”.
Por eso, las autoridades y la población deben estar preparados. La próxima vez que llueva quizás no sean solo 150 los damnificados.
Lluvias seguirán en Collique
Según el Senamhi, lluvias ligeras continuarán cayendo en varios distritos de Lima Este y Norte, entre ellos Comas, y en especial en la zona de Collique, donde hubo un huaico de proporciones el fin de semana.
Las lluvias serán aisladas y poco intensas. Empezarán esta madrugada y se prolongarán hasta la noche del jueves, dijo Senamhi.
Los distritos más vulnerables ante las lluvias son: Carabayllo, Comas, San Juan de Lurigancho, Villa María del Triunfo y Villa El Salvador. Esto en razón a que están rodeados de cerros
Brigadas del Ministerio de Salud recorrerán la zona de Collique para brindar atención a los damnificados.
