Por narcotráfico, terrorismo y delincuencia común. Menciona como “áreas restringidas” a zonas en Ayacucho, Cusco, Huancavelica, Huánuco, San Martín, Junín, Loreto y Ucayali.
Ana Núñez
En momentos en que se hacen grandes esfuerzos para presentar al Perú como un destino atractivo para inversionistas del mundo entero y todo tipo de visitantes, el Departamento de Estado de Estados Unidos (equivalente al ministerio de Relaciones Exteriores) emitió un informe en el que recomienda no viajar a determinadas zonas de ocho regiones de nuestro país debido a existir en ellas, según el documento, riesgos de narcotráfico, terrorismo y delincuencia común.
El informe, llamado “Perú: información específica del país”, señala a Ayacucho, Cusco, Huancavelica, Huánuco, Junín, San Martín, Loreto y Ucayali como las regiones con “áreas restringidas” debido a la presencia del narcotráfico y de Sendero Luminoso.
Como zonas con influencia de Sendero Luminoso, el documento señala a las regiones de Ayacucho, Huancavelica, Huánuco, Junín y San Martín, debido a que en los últimos meses el terrorismo perpetró atentados en “grandes grupos y fuertemente armados” contra las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional.
La frontera peruano-colombiana en el departamento de Loreto, entretanto, es considerada “extremadamente peligrosa” por la presencia de elementos de la guerrilla colombiana y de narcotraficantes.
Asaltos y violaciones
De otro lado, el informe –emitido en momentos en que Perú y Estados Unidos trabajan en la inmediata implementación del Tratado de Libre Comercio firmado entre ambos países– indica que la zona restringida en Cusco (principal destino turístico de nuestro país) se limita a un radio de 20 kilómetros contiguos al río Apurímac y el departamento de Ayacucho.
Aunque se indica que las ruinas de Machu Picchu pueden ser visitadas con seguridad, añade que en las calles del Cusco se presentan casos de asaltos y de violaciones.
A modo de referencia, el documento afirma que “un pequeño pero creciente número” de los 260 mil norteamericanos que anualmente visitan el Perú ha sido víctima de actos graves de delincuencia, como secuestros en automóviles, asaltos y robos armados, “comunes en Lima y otras grandes ciudades”.
Recuerda, por ejemplo, que muchas personas han sido víctimas de secuestro al paso y luego obligadas a retirar los fondos de sus cuentas bancarias.
También alerta sobre los “frecuentes asaltos” de individuos que rompen las lunas de los carros que se detienen en los semáforos, a fin de robarles a las víctimas joyas, carteras, mochilas o cualquier pertenencia que esté al alcance de los malhechores.
Incluso, pide a los turistas no cargar dinero en abundancia, tarjetas de crédito o pasaporte, y cuidarse de los falsificadores de dinero, “un problema muy grave en el Perú”.
En lo que respecta a la ciudad de Lima, se indica que se debe tener especial cuidado con zonas como la Plaza de Acho, en el Rímac; las ruinas arqueológicas de Pachacámac, los sectores aledaños al emporio comercial Gamarra, en La Victoria; la Plaza San Martín, e incluso la Plaza Mayor.
Datos
Salud. En el informe se pide a los viajeros que visiten Perú beber solo agua embotellada y recuerda que en el país existe todavía malaria, cólera, fiebre amarilla, hepatitis, dengue y “otras exóticas y contagiosas enfermedades”.
Alerta. También recomienda a los turistas no acercarse a grandes concentraciones de personas, debido a que los ladrones –que muchas veces son niños– “operan en grupo y se acercan a su víctima sin despertar sospechas”.
“Es sesgado y tergiversado”
Notoriamente mortificado, el premier Yehude Simon expresó su rechazo hacia el informe del Departamento de Estado de Estados Unidos que recomienda no visitar ocho regiones del Perú. Simon, quien calificó el documento de “sesgado y tergiversado”, comentó que “cualquier ciudadano de Europa preferiría venir a nuestra patria antes que visitar al gigante del Norte”, donde –dijo– se producen matanzas protagonizadas por estudiantes universitarios.
Por su parte, el canciller José García Belaunde lamentó la difusión del informe, pero dijo que este no afectará la actividad turística en nuestro país. Agregó que la difusión de estas sugerencias es una práctica rutinaria del gobierno norteamericano. En tal sentido, adelantó que su despacho no emitirá ningún pronunciamiento. El tema, sin embargo, sería visto en el Consejo de Ministros.