Remigio Hernani también presentó reestructuración policial. Hernani negó de nuevo irregularidades en nombramientos de altos cargos y anunció que se investigará “fraude gasolinero”.
Beatriz Jiménez
No hubo sorpresas en la oficialización de la asignación y reasignación de altos cargos en la Policía Nacional del Perú. Tal y como publicó La República en la edición del sábado, el general José Sánchez Farfán ocupará a partir del 1º de enero el cargo de Jefe del Estado Mayor y Luis Henríquez Palacios el de Inspector General.
De los 53 altos cargos, solo dos generales fueron ratificados: el general Miguel Hidalgo en la Dirección Antidrogas (Dirandro) y el general Raúl Óscar Becerra en la jefatura de la Dirección Policial de Trujillo.
El ministro de Interior, Remigio Hernani, no desmintió las informaciones de este diario que señalan que Alan García fue el artífice de que ambos generales mantengan su cargo. “La decisión final en los nombramientos ha sido de Alan García Pérez”, señaló durante la rueda de prensa en la que anunció reestructuraciones en la PNP. “Lo que decide el Presidente no puede ser discutido por ningún ministro”, sentenció, para después añadir que ni el general Hidalgo ni Becerra son apristas, por lo que no habría favoritismos.
Pero mientras que ambos generales fueron ratificados, hubo sonados traslados como es el caso del general Walter Rivera, hasta ahora jefe de la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri) y que estuvo a cargo del operativo de búsqueda de Rómulo León. Rivera abandonó la Dirincri para asumir el puesto de Jefe de la Dirección de la Policía en Piura. Lo mismo ocurrió con el jefe de la Dirección Contra el Terrorismo, Antenor Rosas, quien fue trasladado a la Dirección de Policía Fiscal (Dirpolfis).
Por otro lado, el general Percy Alfonso Rivera Paiva fue asignado al Valle de los ríos Apurímac y Ene con las instrucciones de asesorar y apoyar al Ejército en la lucha antisubversiva. Según informó el ministro Hernani, se destinará un presupuesto especial al frente del VRAE para construir una comisaría en Pichari (La Convención, Cusco).
Denuncian irregularidades
Remigio Hernani volvió a negar las acusaciones de favorecer en los nombramientos a generales que pertenecieron a la antigua Policía de Investigaciones (PIP) y negó textualmente “tener su corazoncito en la PIP”. “¿La Policía de Investigaciones es la que tiene menos ascensos. Entonces, ¿dónde está el favoritismo?”, inquirió tras señalar que entre los ascendidos figuran 6 policías procedentes de la Guardia Civil, 5 de la Republicana y 4 de la Policía de Investigaciones.
Pero junto con denuncias de favorecer a miembros de la PIP, también hay versiones que afirman que Hernani habría influido para nombrar como jefe del Hospital Augusto B. Leguía a su supuesto médico de cabecera, el recién ascendido general Segundo Cabrejos Burga. Según fuentes policiales que prefieren mantenerse en el anonimato, el general Cabrejos cuenta con 24 años de servicio y no los 27 necesarios para poder postular a general como señala el artículo 10 de la Ley 28857. Interrogado al respecto, el ministro negó sarcásticamente las acusaciones. “Yo no estoy loco. No tengo problemas neurológicos”, respondió tras afirmar que el general Cabrejos era médico neurólogo. “No sé de dónde sacaron la información, pero ha debido ser una persona que se siente afectada”, explicó. También explicó que es el Comando Institucional el que señala los candidatos para los altos cargos y que el Presidente es quien tiene la última decisión.
Investigarán “gasolinazo”
Frente a las denuncias del presidente de la Comisión de Defensa del Congreso, Edgard Núñez, quien afirma que la Policía Nacional hace uso irregular de la gasolina que estaría calculado “en varios millones de soles”, Alan García pidió al ministro del Interior investigar el caso. Por su parte, Remigio Hernani señaló que Asuntos Internos haría la investigación, pero emplazó al congresista a presentar pruebas de sus denuncias.
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Presupuesto. Alan García ha aprobado ya un presupuesto de 30 millones de soles para ser destinados a la reestructuración de la VII Dirtepol y la Dirincri.
Computadoras. Según informó ayer el ministro del Interior, Remigio Hernani, este presupuesto será utilizado para comprar 600 computadoras, impresoras y 5 vehículos para cada una de las divisiones de la Divincri. Aunque reconoció que el presupuesto solo le servirá para los 5 primeros meses.
Hacer cambios burocráticos no es suficiente
Frente al anuncio de reestructuración de la Policía, el ex ministro del Interior Fernando Rospigliosi consideró que hacer cambios burocráticos en el organigrama de la Policía no resuelve el problema más importante, que a su juicio es la lucha contra la corrupción. Tampoco el mal reparto de efectivos policiales que favorece a los distritos más pudientes. También consideró que el problema de la Policía no se soluciona asignando más presupuesto, sino haciendo un uso más eficiente de los recursos.
Susana Villarán, ex candidata presidencial y defensora de la Policía en 2002, consideró que más allá de disolver algunas estructuras y fortalecer las comisarías el inconveniente de la Policía es que está divorciada del Comité de Seguridad Ciudadana. “El gran problema de la seguridad de la ciudad está en la ausencia de liderazgo y planeamiento de la máxima autoridad de seguridad ciudadana, que según la ley es el alcalde”, señaló citando la Ley 27993 que establece un sistema de seguridad ciudadana a través de comités distritales y provinciales.