El partido de gobierno se alista para un uevo Congreso Nacional este año. Parte de los llamados “cuarentones” y sector cercano a Nidia Vílchez tratarían de llegar al CEN del partido de gobierno.
Emilio Camacho
Armando Villanueva dio una campanada tan fuerte al resumir la crisis por la que atraviesa su partido que hasta ahora muchos andan aturdidos en Alfonso Ugarte. Y la prueba de este desconcierto es que hay pocas coincidencias en el diagnóstico que connotados apristas ofrecen sobre esta crisis que parece recién descubierta. En los últimos días se han pedido tantas reformas en el Apra que haría falta más de un Congreso Nacional para discutir cada una de ellas. Pero lo más curioso no es esta avalancha de propuestas, sino que algunas se contradicen. Aurelio Pastor, por ejemplo, pide una “actualización ideológica”, y Jorge del Castillo propone en cambio un debate “programático, pero no ideológico”.
En esta vorágine, quien parece tener más claras las cosas es el propio Mauricio Mulder, zarandeado secretario general del aprismo, que reapareció la noche del jueves en la Casa del Pueblo. En un escenario sofocante por los ardores del verano, Mulder calentó aún más a su audiencia al prometer dos asambleas este año: una de comandos juveniles y la otra de sindicatos apristas. Ambas asambleas se harían como parte de una estrategia que busca recuperar los cuadros que el Apra ha perdido en ambos bloques.
Luis Falla Lamadrid, congresista por Lambayeque, coincide con Mulder y dice que su partido debe recuperar al Frente Único de Trabajadores Manuales e Intelectuales, ideado por el propio Víctor Raúl Haya de la Torre en la década del veinte. Pero Falla no lanza esta idea como un conejo sacado del sombrero, sino que sabe bien de lo que habla. “En los colegiados provinciales ya no hay obreros, en Lambayeque no hay uno solo, y esto afecta nuestra base social”, dice.
Otro conocido militante aprista que anda en esta misma línea es Omar Quezada, ex presidente regional de Ayacucho y actual titular de Cofopri, quien espera que un probable Congreso Nacional sirva para atraer más militantes al Apra, “no solo por su edad, sino por sus capacidades técnicas”.
Congreso en marcha
Ante esta aparente coincidencia de criterios lo que toca a continuación es definir cómo y cuándo se hará el Congreso Nacional que piden todos en Alfonso Ugarte. Mauricio Mulder ya adelantó que este cónclave podría darse en seis meses, y lo hizo luego de reunirse el viernes con la Dirección Política de su partido en una cita en la que abordaron oficialmente la convocatoria al Congreso. Mercedes Cabanillas, presidenta de la Dirección Política del Apra, dice que ahora es tiempo de reflexionar y ver los contenidos de este macroencuentro que –aclara– se decidirán colectivamente.
Pero hay quienes parecen no tener tiempo para la reflexión en el Apra y prefieren andar a toda prisa. Son los cuadros que se preparan para competir en el próximo congreso aprista con la intención de ganar un puesto en el Consejo Ejecutivo Nacional (CEN) de este partido. Dicho sea de paso, los que ya calientan motores tienen orígenes variados pero algo en común: no representan a los dirigentes que hoy ocupan un lugar en la Dirección Política del partido y vienen de provincia.
El primer grupo que ha expresado su intención de participar en estas justas, pertenece a los “cuarentones” (colectivo de militantes apristas que recibió la tarea de mejorar la efectividad de los programas sociales de boca del propio Alan García). En este grupo destaca el propio Omar Quezada, quien está acompañado de otros militantes no menos conocidos como Javier Morán, Iván Hidalgo, Mayta Cápac Alatrista, Miguel Rosas, y Víctor López. El problema de este grupo es que también tiene en sus filas a Carlos Arana, cuestionado por sus estrechos vínculos con el ex ministro Agustín Mantilla. Aún así, las ventajas de estos aspirantes no son pocas. Y en este momento la más significativa parece ser su cercanía con Armando Villanueva del Campo, con el que se reunieron días antes de que este pidiera públicamente nuevas elecciones en el Apra (ver foto).
Desde el Congreso surgiría también un nuevo colectivo que les daría pelea a los cuarentones. Este grupo promovería la candidatura de la ministra de Vivienda, la huancaína Nidia Vílchez, a la secretaría general del Apra. Vílchez tendría como principal respaldo político a su colega de bancada, Luis Negreiros. Más aún, fuentes consultadas por este diario sugieren que ambos podrían postular juntos en una suerte de lista colegiada. Quienes le ven futuro a esta segunda opción destacan las recientes conversaciones que Negreiros ha sostenido con una serie de veteranos del aprismo entre los que destacan el historiador trujillano Percy Murillo y Enrique Rivero Vélez, ex presidente de la Cámara de Diputados.
El dato
Receta. El sociólogo Carlos Reyna reconoce que el Apra es el único partido que tiene una estructura de alcance nacional, pero sostiene que esto no es garantía de que su idea de recuperar militantes tenga éxito. Sugiere, por ello, que el Apra discuta en su próximo Congreso Nacional menos aspectos ideológicos y organizativos, y se concentre en asuntos que tienen que ver con el día de los trabajadores, como la ola de despidos que podría incrementarse conforme avance la crisis recesiva.
Cada militante debe ser un voto
]Así como existe una mayoría de apristas que espera un Congreso Nacional para elegir a su nueva dirigencia nacional, existe un grupo reducido de militantes del partido oficialista que considera que este evento no debería realizarse este año. Entre esta minoría destacan el presidente del Congreso, Javier Velásquez Quesquén, y el viceministro de Promoción del Empleo, Javier Barreda.
Este último sostiene que el Congreso Nacional “es innecesario” en un contexto de crisis internacional en el que los principales cuadros del Apra deben concentrarse en que el gobierno “concluya exitosamente su gestión”. “Respeto fraternalmente la posición de Armando Villanueva pero creo que un Congreso Nacional es innecesario, salvo que se debata cómo hacer que el partido ayude al gobierno”, dijo.
En el Apra también hay voces que piden que se redefina el sistema de votación en el Congreso Nacional del Apra. Es el caso de Jorge del Castillo, quien sostuvo que cada militante debería representar un voto, “como lo permite la Ley de Partidos Políticos”. Por su parte, Luis Falla Lamadrid recomendó que se reduzca el número de delegados fraternos (solo con voz) y se fortalezca la presencia de delegados plenos (con voz y voto) en el próximo cónclave aprista.